Castillo de Malpica de Tajo

 

css menu by Css3Menu.com

El castillo de Malpica de Tajo

Es probable que en el emplazamiento actual del castillo (o cercanías) existiese, como posiblemente sucedía en el castillo de Villalba, algún tipo de asentamiento romano que vigilaba y controlaba el vadeo del rio Tajo, por la zona menos profunda (en primavera y el estío), y con fondo y lecho llano, pedregoso (los arenoso son menos adecuados para el vadeo por su mutabilidad con las crecidas y la dificultad de moverse sobre ellas) firme y estable de los alrededores de la chorrera del Peñón y el posterior emplazamiento de la barca. Tampoco tengo constancia(1) de la fecha en que los árabes construyesen, en los siglos X u XI, el castillo fortaleza original.

El 25 de mayo de 1085, el rey Alfonso VI entra en Toledo después de cuatro años de asedio, entradas y salidas, pues estuvo refugiado en la ciudad durante nueve meses en 1072, pero las fronteras (que no debe interpretarse en sentido lineal, sino como una franja de terreno, elástica, oscilante y siempre sometida al albur de avances y retrocesos) entre la zona cristiana y musulmana se encontraban sometidas a alteraciones y eran inestables a causa de los continuos enfrentamientos armados entre uno y otro bando (tierra de guerra), incursiones, para la anexión de tierras y control de las poblaciones conquistadas o simplemente para saquearlas en busca de botín o castigarlas, en las que el rey cristiano no intervenía ni interfería pero consentía con lo que, de una parte, lograba recompersar a los nobles y caballeros que le eran fieles y, al tiempo, iba reconquistando nuevos territorios a los musulmanes facilitando su avance hacia el sur ya que debilitaban las bases materiales de la población, y  preparaban  su  futura  sumisión  a  manos  cristianas; esta cambiante situación se prolongó durante casi otro siglo y cuarto hasta la victoria de la batalla de las Navas de Tolosa.

Para mantener los territorios conquistados los reyes cristianos usaban varias estrategias de repoblación, que ya habían experimentado con buenos resultados en el norte, el otorgamiento de cartas puebla a habitantes procedentes de otros lugares (que al tiempo servían para sostener la precaria defensa fronteriza) y a los mozárabes que ya las habitaban y el otorgamiento de fueros y privilegios (tierras de realengo), o la concesión de amplios territorios a las órdenes militares o nobles o señores a quienes pretendían recompensar servicios prestados (los señoríos).

En esta inestabilidad de las fronteras, que forzaba a la vigilancia de las zonas conquistadas hay que fundamentar los orígenes, y razón de ser, de los castillos. El castillo nace con una función fundamental de vigilancia, control y defensa del territorio, es una fortificación militar que se usa y sirve como barrera, como centro de apoyo de guerreros e intendencia, como refugio de tropas y como defensa en oposición a otra tropa agresora. Y el de Malpica se construiría es ese lugar por su enclave en una de las posiciones de vigilancia y defensa del vadeo del río Tajo, que por su caudal servía de barrera o frontera natural de paso del norte al sur, y a la vez para oponerse al castillo de Villalba constuído enfrente. En tiempos de paz se convertiría en un núcleo o centro activo alrededor del cual se organizaba el devenir cotidiano de los malpiqueños.

Como cito en la página sobre los orígenes del señorío de Malpica, la zona a la que pertenece nuestro pueblo, entonces con una bajísma densidad de población, y su castillo, debió de pasar por manos de los Templarios primero y después de la caída en desgracia de estos (Fernando IV de Francia se apropió de sus bienes y fueron y disueltos por el papa Clemente V) a la orden de Calatrava con un intervalo temporal indefinido. Hasta que fue devuelta a la orden de Calatrava, hubo un intervalo de tiempo en que fue propiedad de Doña Elo, que se habría apoderado de Malpica en 1232.

Sea como fuere, el hecho es que el señorío de Malpica y su castillo existen ya en el 1253, vinculado a Ortun Ortiz Calderón. En el 1307 es propiedad de Fernán Gómez de Toledo, notario mayor del reino de Toledo y camarero de Fernando IV. Algún tiempo después de ser conquistadas estas tierras, el rey D. Pedro I el Cruel crea el señorío de Valdepusa que engloba al de Malpica. En documento de 26 de Mayo de 1357 concede a D. Diego Gómez de Toledo, notario mayor y personaje que ya anteriormente se había distinguido en el servicio de su padre el rey Alfonso XI, dicho señorío, en término de Talavera.

Posteriormente se realizaron reformas menores en el castillo para convertir la antigua fortaleza medieval en mansión señorial y en el siglo XVII, bajo el Marquesado, sufrió el edificio una total renovación o restauración interior que destruyó mucha parte antigua y que se aprecia bien en el patio, con sus columnas del Renacimiento, arcos rebajados y galerías de ladrillo. De aquella época deben datar también las rejas y las ventanas y balcones.

Reproduzcamos la larga descripción de D. Fermín Caballero, de 1825 a 1828, sobre el castillo, en el capítulo VI de edificios:

Esta Casa fuerte parece obra del siglo diez o principios del once. Su arquitectura y materiales indican haber sido construida por los árabes, para que formase parte de la línea de fortificación con los inmediatos Castillos Villalba y de Montalbán. Pero no se halla noticia de su existencia en documento hasta el año de 1307 que consta pertenecía, con la población de Malpica, al Camarero de S. M. Fernán Gómez de Toledo.

La posición que ocupa en la orilla y llanura de la Vega del Tajo, y la inmediación del castillo Villalba, que está situado mas ventajosamente, le debieron dar poca importancia, por lo que no tuvo la celebridad de este ultimo y el de Montalbán. Más que ellos ha resistido, sin embargo, a las injurias del tiempo, pues se conserva en muy buen estado después de ocho siglos.

Su figura es un perfecto cuadrado, con cuatro torres en los ángulos, y otra en la parte posterior. Las primeras son macizas, y la quinta hueca, que por esto y ser la mayor se denomina la torre obscura, la grande, o la del homenaje. Las paredes y torres son de mucho espesor, pero de tierra, excepto en los ángulos, que son de ladrillo. Torres y lienzos están coronados de almenas para mayor defensa.

Fuera de estas tierras, hay una muralla interior también almenada y más fuera lo rodea un foso en seco por los tres lados y por el cuarto lo baña el caudaloso Tajo.

La plataforma del Castillo esta a 13 varas sobre el nivel de este rio; y la torre mayor tiene 70 pies sobre la plataforma La única entrada al Castillo es por un puente de ladrillo, antes levadizo que esta sobre el foso. Pasada la muralla exterior; para entrar al interior hay una estrecha puerta, que es y se llama de hierro, y sobre la que hoy en lo alto de la muralla un bota-piedras o matacán para impedir su entrada. La subida única a las Almenas y torres es por una angostisima y pendiente escalera que hay en la torre grande.

En su origen no tuvo el Castillo mas que lo expresado; mas como posteriormente ceso su uso como puesto fortificado, y de defensa, convino hacerlo habitable sin borrar las señales de su primer destino. Entonces se convirtió en casa-fortaleza, o Palacio-Castillo, para lo cual se hizo el patio y las habitaciones interiores que comprenden los dos pisos. En el bajo hay doce piezas dentro del cuadro interior, y cuatro entre este y la muralla exterior. Los dos gallineros hechos con la galería del patio son mezquinos y quitan a este su hermosura. La pieza donde se esquilaba la cabaña de la Casa es asombrosa. La muralla que baña el Tajo está arruinada(2), no tanto por el choque de las aguas, como por la poca inclinación, el peso del terraplén y las aguas llovedizas. Para subir al segundo alto, hay una buena escalera de tres tramos, aunque poco suave. En este segundo piso hay veinte habitaciones, tres de ellas robadas al corredor o galería. La sala del oratorio es la mayor, y tiene una gran reja que mira al pueblo. Las otras tres salas tienen balcones al Tajo. En el hueco de la torre obscura, esta el almacén chico del aceite, sobre él la cárcel y encima otra pieza por donde se sube a las almenas.

El patio recibe las aguas de los tejados por cuya razón y estar pavimentado de ladrillo es demasiado húmedo e insalubre. (...).

Este Castillo sirvió de abrigo en la guerra de la independencia a varias partidas de ambos ejércitos; y a pesar de estar construido cuando no se conocía la pólvora, se defendieron en el poco más de cien franceses, de más de dos mil españoles que los atacaban.

En el gran cargo de la puerta principal, se halla marcado el año de 1685 en el que se hizo la puerta, y tal vez toda la obra del patio y habitaciones.

Se conserva un cañoncito sin lombarda de los que hubo en este fuerte y otro igual cayo al Tajo cuando la ruina del murallón. También se guarda parte de hermosa bocina, que últimamente serbia para llamar desde el Castillo al molino de Corralejo, donde se oía a pesar del ruido del agua y de las piedras.

Hay algunas pinturas de poco merito, entre ellas la de Ntra. Sra. de la Leche que esta en la escalera.

En este Castillo hubo un Alcaide, y hoy un guarda que se dice Castillero para cuidar del edificio. Alguna vez se han arrendado piezas para encerrar granos, pero ahora esta todo destinado para alojarse S.S.E.E. cuando van a Malpica, para el Administrador y Castillero. (3)

Y también en el diccionario:

Fuerte edificado por los árabes hacia el siglo diez y que aún se conserva en buen estado. En el año de 1576 existían en el una culebrina de bronce y dos cañones pedreros de hierro, de los que se conserva una pieza. Es muy probable que estas armas las trajese el Mariscal D. Pelayo de Ribera en 1450 de la plaza de Tarifa, pues su construcción es de aquella época. El pedrero que aún existe, tiene solo el tiro, y le falta la lombarda ó recamara, las barras y cadenas. Como se halla enmohecido y lleno de escoria, hace creer a los pocos versados en este ramo que es de una pieza su cañón; siendo así que se compone de muchas aristas, arandelas y abrazaderas, a manera de cubeta. Esta pieza, igual a las que se usaron en la conquista de Granada, merecía que se conservase con más cuidado, como un monumento de la destreza española en el siglo XV.

El Castillo es cuadrangular, con cinco torres, foso, murallas y almenas, de buena defensa para el alma blanca. Esta bañado por el caudaloso Tajo por el N.O. (4)

Acompañamos estos párrafos de las reproduciones de los planos que D. Férmín Caballero levantó en 1825, de las dos plantas del castillo.

Plano 1ª planta del castillo de Malpica de Tajo según F. Caballero

Plano 2ª planta del castillo de Malpica de Tajo según F. Caballero

Muestro ahora detalle de un plano del Instituto Geográfico Estadistico en que se dibuja la primera planta del castillo de Malpica de Tajo en 1882.

Plano 2ª planta del castillo de Malpica de Tajo según F. Caballero

La foto siguiente, perteneciente a la colección "Legados de la Tierra", está fechada a finales del XIX (1888) pero pienso que ha de ser anterior por el nº de ventanas de esta fachada Oeste y la espadaña de la campana.

El castillo de Malpica de Tajo a finales del XIX, Legados de la Tierra

La siguiente foto, también perteneciente a la colección "Legados de la Tierra", está tomada en una posición muy similar pero a principios del XX ya no muestra esos elementos citados, ni la espadaña ni las ventanas rectangulares sino que ahora presentan el estilo mudejar actual.

El castillo de Malpica de Tajo a principios del XX, Legados de la Tierra

En esta otra de la misma colección y finales del siglo XIX, pero de la fachada Este, puede apreciarse la ausencia del puente y vegetación circundante y una estructura más antigua y sobria.

El castillo de Malpica de Tajo a finales del XIX, Legados de la Tierra
El castillo de Malpica de Tajo foto de 1922

El muro viejo y el muro este sobre el Tajo aún no están derrumbados

Siguiendo el orden cronológico reproduzco ahora la descripción del castillo de Malpica de Tajo que realiza el Conde de Cedillo en 1959(5):

Hállase situado en llano, en la margen izquierda del Tajo, cuya mansa corriente lame sus fundamentos. Como para su construcción se tomó por pauta la dirección del río, está inperfectamente orientado, correspondiendo aproximadamente sus cuatro ángulos a los puntos cardinales. La planta es cuadrilonga y la disposición muy regular. Forman el castillo cuatro espesas cortinas con torres cuadradas y algo avanzadas en las esquinas y macizas interiormente. La cortina del S O. queda interrumpida para hacer lugar a la también cuadrilonga torre mayor o del homenaje o «torre Hueca» (porque lo es, en efecto, a diferencia de sus compañeras), que se destaca de la línea más que las otras. Defiende a esta fábrica un foso limitado en los tres lados no correspondientes al río por sendos contramuros que forman barbacana. En el aparejo domina el ladrillo, pero los muros están rellenos de tierra, apiñada hoy en durísimo núcleo. Tanto las cinco torres como las cortinas interiores y exteriores van provistas de merlones prismático-cuadrangulares con piramidión, siendo aproximadamente igual la Iongitud de meflones y almenas. No hay en todo el edificio más voladizos que dos matacanes con ménsulas de piedra, puestos en lo alto de la cortina del N E., que corresponde al río y en la contrapuesta torre del homenaje, respectivamente. En ésta y en el adarve consérvanse algunos arcos apuntados que realzan el carácter de la fuerte fábrica. Un cuerpo arquitectónico de ladrillo con sencillo arco de aquel mismo género, sito en la cortina del N O. y próximo al río, señala el único punto de ingreso al recinto exterior, frente al Tajo, aparece la entrada al recinto interior, que es mezquina, carece de carácter y presenta sobre sí un pequeño escudo con las fajas de la casa de Ribera. Las ventanas no ofrecen particularidad notable. Arquitectura militar. ¿Siglo XIV?

Y para cerrar, expongo una serie de fotos actuales de la vista Este exterior del castillo:(6)

Vista actual desde el Este del castillo de Malpica de Tajo

Vista actual desde el Este del castillo de Malpica de Tajo

Vista actual desde el Este del castillo de Malpica de Tajo

Vista actual desde el Este del castillo de Malpica de Tajo

Vista actual desde el Este del castillo de Malpica de Tajo

Vista actual desde el Este del castillo de Malpica de Tajo

Vista actual desde el Este del castillo de Malpica de Tajo


(1) Tal vez entre la documentación que los duques de Arión han depositado en codominio en el Archivo Histórico de la Nobleza de la Junta de Comunidades de Castilla la Mancha ( que continúa en proceso de catalogación) se encuente algún documento que arroje luz sobre este tema de los orígines, aunque no es probable pues Fermín Caballero, que tendría, en el siglo XIX, libre acceso a toda esta documención solo cita en su obra que "parece obra de siglos X u XI" y "su arquitectura y materiales indican haber sido construído por los Árabes" Personalmente pienso que debío de haber en este lugar o cercanías algún tipo de asentamiento romano e incluso íbero anteriores. >>

(2) Según expone posteriormente Fermín Caballero, cuando se hundió esta parte del murallón exterior, que reflejó en el criquis que muestro más arriba, se precipitó al Tajo el segundo de los dos cañoncitos de que constaba el castillo. Para reparar este desplome y evitar que continuara el hundimiento se construyó, posiblemente a finales del XIX o principios del XX, pues en el mapa del Instituto Geográfico Estadistico de 1882 a ún no figura, un muro de contención de la fuerza de la corriente. Es el mítico "MURO" desde el que nos lanzábamos, a modo de trapolín, al agua en ocasiones haciendo una fila de bañistas que nos ibamos lanzando consecutivamente al agua y en otras ocasiones eran exhibiciones individuales. Recuerdo grandes saltadores, por la altura y belleza de sus "clavadas" como Quini y su hermano Fulgencio, Julián y Teófilo. También recuerdo que uno no podía considerarse buen bañista del Tajo si no cruzaba hasta el Muro en donde, los mayores te obligaban a saltar al agua y te daban "zampuzones" y " aguadillas". Había un par de mozos, cuyo nombre no recuerdo, que como estuviesen en el muro no dejaaban "secarse" a nadie, si te veían seco te forzaban, de motu propio o agarrándote de piernas y manos a lanzarte al agua, después de tiraban ellos y distribuían una buena ronda de "zampuzones". Dependiendo del caudal y la corriente del río, cruzabamos más o menos perpedicularte desde la isal del otro lado hasta el Muro, si la fuerza de la corriente era grande, nos desplazábamos hasta la tercera cepa, paralelemente al puente, y después bajámos corriente abajo hasta el muro. Pero si llegar era difícilhabía que ser un buen nadador para vover de nuevo a la isla, había personas, y ocasiones, sobre todo si llevábamos la cámara inflable del trator del tío Ilidio, en que nos dejábamos arrastrar por la corriente e íbamos a parar para salir en "Los Palos" (en el antiguo embarcadero derecho). No recuerdo en qué año comenzaron las mujeres a ir al Muro, recuerdo ver a Mari Carmen y Sagrario (panaderas), La Tori y su hermana, Justi (la hermana de Paco) y algunas de sus amigas, Sonia y pocas más, que, al menos a mí, que siempre he sido tímido, me coartaban en mis actuaciones y comportamiento. Un bastantes años en que se podía acceder al muro, bajando por el borde de la verja de metal y desplazarse gaviones adelante hasta bajar al "muro viejo" (que estab semihundido) y de ahí al Muro principal. >>

(3) TALAVERA ALMENDRO, A., El estado de Valdepusa y Malpica: Apuntes de una historia en común, ediciones Ende, 2016, páginas 129, 130 y 131, sobre un manuscrito de CABALLERO Y MORGÁEZ, Fermín. Descripción Histórica, Cronológica, Estadística y Topográfica del Marquesado De Malpica, 1828.>>

(4) TALAVERA ALMENDRO, Arsenio, El estado de Valdepusa y Malpica: Apuntes de una historia en común, ediciones Ende, 2016, página 295, basada en el manuscrito de CABALLERO Y MORGÁEZ, Fermín. Descripción Histórica, Cronológica, Estadística y Topográfica del Marquesado De Malpica, 1828. >>

(5) LÓPEZ DE AYALA ÁLVAREZ DE TOLEDO (Conde de Cedillo), Catálogo monumental de la provincia de Toledo, 1959, páginas 154 y 155. >>

(6) En esta galería de fotos sobre el castillo pueden verse otras pocas, en esta galería de variaciones del atardecer otras cuantas y en la galería de Moisés Rojas Cabezudo se exhiben excelentes fotografías ponorámicas del castillo. >>