Flora y fauna de Malpica de Tajo

 

La toba o cardo borriquero (Onopordum illyricum)

Etimología del Onopordum illyricum

El nombre genérico procede de la unión del griego {onos} que significa «asno» y {porde} quiere decir «pedo» pues solía asegurarse que la alcachofa del cardo borriquero, por la que los burros, asnos o pollinos sienten auténtica pasión (de ahí su apellido), les provoca unas poderosas flatulencias. Su nombre específico {illyricum} significa «de Iliria» antigua región del Adriático oriental (Balcanes) que corresponde a las actuales Croacia, Serbia, Bosnia, Montenegro y Albania.

Inflorescencia de la Toba, cardo borriquero (Onopordum illyricum)
Capítulos de la Toba, cardo borriquero (Onopordum illyricum), capítulos
Flor de la toba o cardo borriquero (Onopordum illyricum)

Descripción del Onopordum illyricum

El Onopordum illyricum es una hierba bienal, por lo general multicaule, espinosa, verde-grisácea, blanquecina o blanco-grisácea, rara vez verde, con indumento denso de pelos unicelulares araneosos que ocultan pelos pluricelulares glandulíferos largos y glándulas sésiles. Los tallos son erectos o erecto-ascendentes, por lo general ramificados desde la base, de sección más o menos poligonal, longitudinalmente acostillados, alados en toda su longitud –con de seis a ocho alas con nervadura reticulada poco conspicua y con espinas –, provistos de hojas en la mayor parte de su longitud y con indumento densamente araneoso, sobre todo en una de las caras de las alas. Las hojas son algo carnosas, con nervadura principal pinnada y nervio medio prominente por el envés; las hojas caulinares medias son sésiles y decurrentes, lanceoladas o elíptico-lanceoladas –las superiores linear-lanceoladas–, pinntatífidas o pinnatipartidas –rara vez algunas pinnatisectas–, con de cinco a ocho pares de lóbulos, triangular-lanceolados, con espinas, grisáceas, verdosas o blanco-grisáceas y con indumento araneoso; las hojas basales son semejantes, sésiles o con pecíolo, a veces rosuladas y a menudo secas en la antesis. Los capítulos están pedunculados y son solitarios y terminales –los más grandes– o en grupos terminales de dos a siete reunidos a su vez en inflorescencias complejas racemiformes o corimbiformes, alcanzados por la hoja caulinar superior, que por lo general no los sobrepasa. El involucro es ovoide, a veces laxamente araneoso, sobrepasado al menos por las flores de la periferia; las brácteas son coriáceas, imbricadas y aparentemente dispuestas en de siete a diez series, gradualmente mayores desde fuera hacia dentro, planas o a veces con margen involuto en su parte superior; las externas son lanceoladas o triangulares, patentes o reflexas tras la antesis, sin nervios aparentes, con margen serrulado hacia la base y espina, verdosas, a veces violetas en la parte superior y glabras o a veces araneosas; las medias son semejantes pero por lo general violetas o rosadas en la parte superior y con la porción reflexa o patente por lo general aplanada y más corta –sin incluir la espina– que la parte basal adpresa; las internas son lanceoladas o linear-lanceoladas, erectas, por lo general rosadas o violetas en la parte superior, de margen serrulado, con cara abaxial glandulosa y antrorso-escábrida al menos hacia el margen, y cara adaxial glabra, excepto su parte superior que es glandulosa o víscida. El receptáculo es plano, con los bordes de los alvéolos ovado-acuminados e irregularmente dentados. La corola es tubulosa y glandulosa en su cara externa; el tubo es blanco; el limbo de un rosa violáceo y con lóbulos desiguales. Los estambres tienen anteras rosadas o violetas y con apéndices basales fimbriados. El estilo es rosado, con ramas estilares de un rosa intenso o violetas, al principio unidas y divergentes en su extremo cuando son receptivas. Los aquenios son obovoides, de sección más o menos cuadrangular, con de cuatro a cinco costillas longitudinales conspicuas y varios nervios tenues en cada cara, con superficie cerebroide, truncados en el ápice, grisáceos o de un color acastañado –en la madurez a veces con algunas máculas negruzcas alargadas, irregulares y dispersas– y glabros; la placa apical tiene margen entero y nectario; El hilo cárpico es ovado. El vilano es blanquecino o rosado, con dos filas de pelos de escábridos a subplumosos y con dentículos o barbillas.

Alcachofa seca
Toba, cardo borriquero (Onopordum illyricum), capítulos

Una forma de disguir las tres especies del género Onopordum que he visto por estos lares es fijándonos en las brácteas: La Onopordum illyricum (Toba) y la Onopordum acanthium (alcachofa borriquera) tienen las brácteas externas reflejas (la primera planas y la segunda cilíndricas) y la Onopordum nervosum (cardo gigante o borriquero) presenta todas la brácteas erectas y planas.

Diferencias entre las Onopordum (nervosum, illyricum y acanthium
Diferencias entre las Onopordum (nervosum, illyricum y acanthium

Distribución y hábitat

Ruderal y nitrófila, crece en suelos alterados, secos y soleados, como campos, reposaderos del ganado, orillas de caminos. Es bienal. Las semillas son dispersadas por el viento a nivel local, los seres humanos, el agua, el ganado y la fauna están involucrados en la dispersión a larga distancia. Es planta monocárpica, pues tan solo florece y fructifica una única vez en su vida. El carácter bienal de esta planta le permite dos años para completar su ciclo de vida. Durante el primero la planta desarrolla la roseta de hojas basales y la raíz, acumulando durante esa temporada sustancias nutritivas en sus órganos de reserva. Durante los meses más fríos, la toba entra en un periodo de latencia y será en la siguiente primavera cuando el tallo de la planta se alargue rápidamente superando al resto de competidores. La planta tras las flores, produce los frutos cargados de semillas. Agotadas sus sustancias de reservas, finalmente morirá. Constituye una eficaz estrategia adaptativa de las plantas bienales.

Principios Activos

Contiene alcaloides, flavonilglucósidos, aesculina, taninos y otros principios de sabor amargo.

Tallo de la Toba, cardo borriquero (Onopordum illyricum), tallo
Inflorescencia de la Toba, cardo borriquero (Onopordum illyricum)
Inflorescencia de la Toba, cardo borriquero (Onopordum illyricum)

Usos del Onopordum illyricum

El Onopordum illyricum se ha usado, tradicionalmente por los campesinos, como antiguo remedio casero contra la tos, las dolencias de la vejiga y las heridas mal cicatrizadas; aunque la fermentación del jugo de sus tallos se empleaba para animar las fiestas y los carnavales por los alcaloides que contiene. El aceite se usaba para cocinar. Los receptáculos carnosos de la cabeza y las nervaduras de las hojas tapones privados son comestibles, utilizados como los de congéneres O. acanthium y el cardo gigante (O. nervosum) y alcachofa salvaje, Cynara cardunculus.

Toba, cardo borriquero (Onopordum illyricum), capítulo
Inflorescencia de la Toba, cardo borriquero (Onopordum illyricum)
Toba, cardo borriquero (Onopordum illyricum), flor
Toba, cardo borriquero (Onopordum illyricum), brácteas
Flor de la Toba (Onopordum illyricum)
Flor de la Toba (Onopordum illyricum)
Flor de la Toba (Onopordum illyricum)
Flor de la Toba (Onopordum illyricum)
Flor de Toba (Onopordum illyricum)
Flor de Toba (Onopordum illyricum)

Flor de Toba (Onopordum illyricum)

Inflorescencia de la Toba, cardo borriquero (Onopordum illyricum)
onopordum illyricum
Toba, cardo borriquero (Onopordum illyricum), tallo
Capítulo de la Toba, cardo borriquero (Onopordum illyricum)
Capítulo de la Toba, cardo borriquero (Onopordum illyricum)
Sección partes del capítulo de una flor compuesta, Toba, cardo borriquero (Onopordum illyricum)
Estructura y partes del capítulo de una flor compuesta, Toba, cardo borriquero (Onopordum illyricum)
Estructura y partes de una flor compuesta, Toba, cardo borriquero (Onopordum illyricum)
Capítulo de la Toba, cardo borriquero (Onopordum illyricum)
Inflorescencia de la Toba, cardo borriquero (Onopordum illyricum)
Inflorescencia de la Toba, cardo borriquero (Onopordum illyricum)
Inflorescencia de la Toba, cardo borriquero (Onopordum illyricum)
Inflorescencia de la Toba, cardo borriquero (Onopordum illyricum)
Toba, cardo borriquero (Onopordum illyricum), semillas
Cipselas y vilano de la Toba, cardo borriquero (Onopordum illyricum)
Cipselas sin vilano de la Toba, cardo borriquero (Onopordum illyricum)
Cipselas sin vilano de la Toba, cardo borriquero (Onopordum illyricum)
Semillas de las Onopordum, acanthium illyricum,macracanthium y nervosum

Curiosidades sobre del Onopordum illyricum

1)Ilusión óptica de profundidad

Ilusión óptica de profundidad del receptáculo de la Toba, cardo borriquero (Onopordum illyricum)

¿En relieve o bajo relieve? Como ocurre con el receptáculo de muchas plantas (aquí nos referimos a una de las Asteraceae), si contemplamos el receptáculo del Onopordum illyricum (toba o cardo borriquero), los alveolos en que se insertan las cipselas pueden aparentar que son huecos (bajorelieve) o están rellenos (en relieve) y si te acostumbras a verlos de una forma cuesta, a veces, verlos de otra, se trata de una ilusión de profundidad, en relive, que se tiene que ver con el sombreado, en la imagen (tamada desde arriba), no hay sombras apreciables y por tanto en ocasiones nos dará la impresión de ver los huecos de insercción de las cipselas y otras ver un relieve; en el momento de escribir esto lo veo en relieve a pesar de que sé (lo he palpado con la yema del dedo) que son huecos. ¿Cómo lo ves tú?

2) Número de oro (Ø), sucesión y espiral de Fibonacci

Como sucede en otras Asteraceae (las más conocidas y estudiadas, la margarita y el girasol), si en los alveolos en que se insertan las cipselas del Onopordum illyricum (toba o cardo borriquero) trazamos las ramas espirales levógiras y destrógiras y las contamos suelen distribuirse de acuerdo con dos números consecutivos de la sucesión de Fibonacci (1, 1, 2, 3, 5, 8, 13, 21, 34, 55, 89, 144, 233, 377, ...) cuyo cociente está a su vez relacionada con el número áureo o número de oro ya que, como sabemos la sucesión formada por el cociente entre dos términos consecutivos de la sucesión de Fibonacci tiende a ese número de oro (Φ), el más irracional de los números (teorema de Hurwitz). En el caso que he fotografiado, 21 en sentido levogiro (antihorario) y 34 en el sentido dextrógiro (horario).

21 ramas espirales levógiras en el receptáculo de la Toba, cardo borriquero (Onopordum illyricum)
34 ramas espirales dextrógiras en el receptáculo de la Toba, cardo borriquero (Onopordum illyricum)

¿Es una mera casualidad u obedece a alguna ley de la naturaleza causal?. Estudios de filotaxis matemática como los del botánico Roger V. Jean en piñas, concluyeron que el 92 por cien de las piñasas seguían el patrón de los números consecutivos de la sucesión de Fibonacci y el 2 % de las que no seguían el patrón de la sucesión de Fibonacci, se ajustaban a la sucesión de Lucas ( construida con la misma recurrencia (2; 1; 3; 4; 7; 11; ...) y las fracciones de términos consecutivos también convergen al número de oro (Φ) ), pero ¡cuidado! la naturaleza no sabe matemáticas, las matemáticas son una creación humana, la explicación pasa por el estudio del crecimiento y disposición a partir de los primordios (Morfogénesis), que se realiza según estados de energía mínima, impuesta por la limitación del espacio trimidimensional en que se desarrollan, formando ángulos mínimos con los anteriores que les permitan una distribución lo más compacta posible, por eso se desarrollan en espiral que podemos ajustar a la de Fibonacci (pero también a otras espirales logarítmicas) y en ello algunos lo conectan con el número de oro y la sucesión de Fibonacci, que es un modelo para explicar su comportamiento, al crecer en un espacio limitado y realizarlo de la manera más eficiente, pero seguramente se podría ajustar a otros similares pero no creo que sea un principio universal de crecimiento natural sin excepciones.

Otros nombres comunes, vernáculos o vulgares del Onopordum illyricum

Alcachofas silvestres, arrecata, arrecate, cardillos, cardo, cardo borriquero, cardo borriqueño, cardo cabeza de turco, cardo del demonio y cardos toberos.