Flora y fauna de Malpica de Tajo
El nombre genérico Ictalurus procede del griego {ichthys} que significa pez y {ailouros} que significa gato. El nombre específico melas procede del griego {melas} que significa "negro", de ahí el pigmento que confiere el tono moreno a nuestra piel morena, la melanina.
Cuerpo abigarrado, compacto, macizo y robusto, cilíndrico en la parte delantera y más comprimido hacia atrás. La piel es lisa y carente de escamas, pero está cubierta con una mucosidad protectora. Los radios de las aletas están dispuestos de la siguiente forma: dorsal, 1 radio duro y 7-9 radios blandos divididos; anal 15-22 radios blandos divididos; pectorales 1 radio duro y 8 radios blandos divididos; las aletas ventrales 8 radios divididos. La aleta caudal es cuadrada, truncada y tiene el margen ligeramente convexo. Los primeros radios de la aleta dorsal y de las pectorales son espiniformes y con los márgenes de los demás casi lisos. Las espinas de sus aletas (dorsal y pectorales) protegen al pez gato de eventuales depredadores, incluso en los momentos de inactividad y cuando está enterrado en el fango de los fondos de las zonas acuáticas en las que vive. La aleta adiposa es pequeña y discreta y está casi totalmente sujeta a la parte inferior del dorso. La cabeza es ancha con una boca terminal con labios carnosos, dientes finos, cónicos y colocados de forma irregular. Los ojos son pequeños, saltones y redondos. Es destacable que la mayoría de peces gato americanos sólo tienen 3 pares de barbilones, pero los del género Ameiurus como sus parientes asiáticos, cuentan con cuatro pares: en los orificios nasales (1 par), mandíbula superior (1 par) y mandíbula inferior (2 pares, éstas de color oscuro). Coloración: Variable. El lomo puede ser ocre parduzco o marrón negruzco tirando a gris verdoso e inclujso amarillento, y la panza plata o blanco-crema. Los costados son más claros que el dorso. Las aletas son parduzcas o grises y los radios más oscuros. Sobre el pedúnculo caudal presenta una banda vertical de color claro. El aspecto externo de este pez es muy similar al del “Bagre cabeza de toro amarillo” (Ameiurus natalis), diferenciándose principalmente en que los barbilones inferiores de A. melas son negros, mientras que los de A. natalis son blancos. El color del cuerpo no difiere tanto como sus nombres comunes pueden hacer suponer y no es suficiente para diferenciar ambas especies; de hecho se pueden encontrar ejemplares de Ameiurus “amarillos” más negros que los propios Ameiurus “negros”. Hay una tercera especie muy similar denominada “Bagre cabeza de toro marrón”, Ameiurus nebulosus.
Tamaño: Se citan cifras de hasta 60 cm en estado salvaje, en cautividad es raro que supere 35-45 cm. Pese a su gran tamaño, es el menor de los de su género. Otros “bullheads” pueden alcanzar entre 75 y 100 cm.
Biotopo: Lagos, estanques y remansos de ríos tranquilos con aguas ricas en vegetación y de fondo suave, fangoso o arenoso, mezclado con grava.
Distribución: Nativo de Norteamérica (Estados Unidos, México y Canadá) ha sido introducido para la pesca deportiva en numerosos países europeos, como España, Italia, Bélgica, Alemania, Francia, Gran Bretaña, Suiza, Holanda, Rusia, etc., donde ha causado enormes daños a la ictiofauna local y ha sido responsable de la extinción de numerosas especies europeas . También se conocen introducciones en Chile. Es considerada como una especie potencialmente destructiva.
Comportamiento: Pez de fondo nocturno. Migratorio y gran cazador (depredador en hábitat natural). Suele permanecer oculto entre las raíces sumergidas de los árboles esperando a que se acerque alguna presa. Puede matar a cualquier pez menor que él que comparta su hábitat. Los jóvenes son sociables y activos. Los adultos se vuelven solitarios y son nocturnos. Suelen ocultarse enterrándose en el sustrato (en estado salvaje esto les ayuda a sobrevivir en caso de desecación de las aguas). Compatible con peces más grandes que él (especialmente cíclidos), a los pequeños se los comerá. Esperanza de vida de 9-10 años, pero por lo general no supera los 5 años en cautividad, probablemente por falta de espacio. Deben ser manejados con mucha cautela ya que cuando se ponen nerviosos, colocan los radios espiniformes de sus aletas rectos, a modo defensivo para no ser tragados, con lo pueden provocar heridas dolorosas y de lenta curación. Estas espinas producen un veneno suave.
Temperatura: Soporta sin problemas entre 8-30ºC, (en circunstancias extremas, probablemente más) un rango amplísimo al que muy pocas especies pueden hacer frente: por eso se aclimata a todo tipo de climas y se convierte en una especie invasiva.
Agua: pH 6.0-7.6. Tolera condiciones muy pobres ya que es más tolerante a aguas turbias, contaminadas y con poco oxígeno que otros siluros. Se cita que puede vivir con sólo 5 mg de Oxígeno.
Carnívoro-piscívoro. Alimento vivo que recoge del fondo (limpiador). Bivalvos, crustáceos, larvas e insectos, moluscos, peces y huevos de peces. También comerán con agrado trocitos de carne y corazón. Aceptarán alimentos para peces grandes como tabletas que se hundan. También es bueno algún aporte vegetal.
Alcanzan su madurez sexual a los 2 años de edad. La freza tiene lugar entre los meses de marzo a julio, con temperaturas superiores a los 18-21ºC. Ambos peces excavan un hoyo del tamaño de la hembra en algún cobijo de suelo arenoso con vegetación, donde se depositarán entre 2.500 y 4.000 huevos redondos y gelatinosos, de color crema, de unos 3 mm de diámetro. Durante el cortejo la pareja se coloca con los hocicos enfrentados tocándose con los barbillones. Luego se colocan uno junto al otro y se suceden constantes sacudidas y cabezadas enérgicas. El macho pone su cola sobre la cabeza de la hembra que coloca los huevos tras largas contracciones y el macho los fecunda en ese momento. Los huevos eclosionan en el plazo de 5-10 días y son custodiados por los progenitores. Precioso es el ver desplazarse a los alevines con sus padres pues forman una esfera compacta. El padre atacará cualquier extraño que entre en la bola de alevines.
Junto con la percasol, es una de las introducciones de peces alóctonos más perjudiciales, ya que destruyen o disminuyen drásticamente las poblaciones de las especies de peces autóctonos de las aguas en que se asientan, por su elevada tasa de reproducción y sus hábitos predadores. Además desde el punto de vista de la pesca, no dejan picar a otras especies que sean capaces de convivir con ellos, cebes con lo que cebes, si hay peces gato, serán los primeros en picar.