Flora y fauna de Malpica de Tajo


 

El olivo (Olea europaea)

Origen de la Olea europaea

Existen dos hipótesis sobre el origen del olivo, una que postula que proviene de las costas de Siria, Líbano e Israel y otra que lo considera originario de Asia menor. La llegada a Europa probablemente tuvo lugar de mano de los Fenicios, en transito por Chipre, Creta, e Islas del Mar Egeo, pasando a Grecia y más tarde a Italia. Los primeros indicios de la presencia del olivo en las costas mediterráneas españolas coinciden con el dominio romano, aunque fueron posteriormente los árabes los que impulsaron su cultivo en Andalucía, convirtiendo a España en uno de los primeros paises productores de aceite de oliva a nivel mundial. La propia palabra "aceite" es de origen árabe, procedente de la palabra "az-zait", que quiere decir "jugo de aceituna".

El olivo

El olivo es un árbol de la familia de las oleáceas que puede llegar a medir unos 15 metros de altura. Su tronco de color gris claro, está lleno de protuberancias y fisuras, que van en aumento a medida que se hace mayor. Sus hojas son opuestas, blanquecinas por el envés, como consecuencia de la densa pubescencia (vello) que las recubre para protergerlas de las inclemencias del tiempo, y de color verde brillante por el haz. Con flores pequeñas y de gran fragancia. Tiene por fruto las conocidas aceitunas. Presentan tamaños diferentes, según las variedades. En sus comienzos son de color verde, y a medida que maduran se vuelven negras.

Aceitunas y hojas del olivo

Variedades

En el mundo se conocen cerca de doscientas variedades de olivo. En España, la antigüedad de las variedades actuales se remonta al inicio de su cultivo. Existen referencias de que las variedades conocidas en la actualidad ya lo eran en el siglo XV, ello es debido a la falta de programas de mejora. En Malpica tradicionalmente el olivar era de la variedad cornicabra, con la llegada de nuevos agricultores y aceiteros la picual, arbequina y hojiblanca ya son también conocidas.

Plantación

La obtención de nuevas plantas de olivas se suele hacer mediante dos métodos: (a) Reproducción vegetativa a partir de un esqueje de rama (el más común) y (b) sexual o por semillas (método obsoleto).

(a) La reproducción vegetativa puede realizarse:

- Por estaca o esqueje de rama vertical se realiza cortando trozos vigorosos de ramas cuyo grosor no supere los 4 cm ni sea inferior a 1 cm. Se limpian podando las ramas laterales y se siembran en tierra fértil a 20 cm de profundidad y 30 cm de separación entre cada una de ellas. Se utilizan estaquillas de un año fáciles de manejar y en mejor estado sanitario, que pueden ser recolectadas a lo largo de todo el año. Las estaquillas de 12-15 cm. de longitud y con dos pares de hojas, se sumergen en IBA (ácido indolbutílico) a 3000 ppm., con objeto de favorecer la capacidad de enrraizamiento. Posteriormente se colocan en cámaras de nebulización sobre medio inerte (perlita), con calor de fondo (25°C) y alineadas. Entorno a los 45 días (según variedad y condiciones de temperatura), aparecen los primordios radicales, momento a partir del cual se pueden trasladar a macetas en umbráculo que permita adoptar la planta a una atmósfera más agresiva. Este sistema permite la entrada en producción un año antes y facilita la formación del árbol.

- Esqueje con talón: con este procedimiento, las ramas se cortan con un pedazo de tronco grueso del cual han brotado, así se incrementa el área enraizable y se acelera y facilita el proceso de formación de raíces.

- La estaca horizontal es el procedimiento más seguro y rápido. Se eligen ramas fuertes que tengan entre tres o cuatro ramificaciones. Se cortan las ramas gruesas de unos dos o tres metros de longitud; se limpian y podan y se siembran en hoyos de 25 cm de ancho, en los que se han colocado previamente tierra suelta y fértil. Las estacas se entierran unos 10 o 20 cm dependiendo de la longitud de la rama, de tal manera que las ramificaciones queden en tierra y tengan al menos dos yemas fuera de ella; esta estaca se mantiene con el suelo húmedo para que emita raíces. A continuación, se abre el hoyo y se separan las ramas que han enraizado con sus correspondientes brotes, las cuales se llevan a su lugar definitivo.

- Los rebrotes que salen de la base del tronco o los que brotan de las raíces constituyen los esquejes ideales ya que enraizan fácilmente; a veces, poseen alguna raíz a causa de encontrarse en su base bajo tierra. Puede acelerarse su brotación si se les hace algunos cortes y se recubre de tierra desde la misma cepa. Se preparan como los otros esquejes.

- Los acodos: las ramas o vástagos bajos se pueden doblar o enterrar, haciéndoles uno o varios cortes en el lugar por donde se desee que broten las raíces. Otro procedimiento consiste en envolver las ramas de uno a cinco centímetros de grosor en una turba que se mantiene húmeda, envuelta y sujeta con un plástico u otro material que sirva de bolsa contenedora; se ata por sus dos extremos al tramo de rama que se desea reproducir. En cuanto hayan brotado las raíces se corta la rama por debajo de ellas y se transplanta.

(b) A las aceitunas se les quita la carne, se abre el hueso y se siembra la almendra en tirra fértil y húmeda. Alcabo de dos semanas brota la planta que será una oliva silvestre o acebuche, luego hay que injertarla antes de llevarla al vivero para continuar su crecimiento antes de trasplantarla a su ubicación definitiva.

Injertado

Los olivos se injertan para cambiar de variedad, bien sobre olivos adultos o en vivero sobre acebuches jóvenes, para aprovechar algunas características del patrón sobre el que se realiza el injerto (vigor, resitencia a determinado tipo de suelo o temperaturas extremas, etc).

Los tipos de injerto más comunes son el injerto de púa y el de yema.

Injertos de pua: Es, con diferencia, el más utilizado tanto en vivero como en parcela, a su vez se suelen practicar dos tipos de injerto de púa el de hendidura simple o de T o el de hendidura múltiple (doble normalmente)

Injerto de púa

El de hendidura simple se suele usar para ramas jóvenes de diametro similar y pequeño y el múltiple sobre patrones de ramas ya viejas y gruesas o sobre troncos. Los injertos han de tener al menos un año y como mínimo tres yemas. Las púas han de colocarse de manera que estén pegadas a la corteza del patrón para favorecer la soldadura patrón-injerto. Este tipo de injerto hay que realizarlo siempre al inicio del periodo vegetativo de Febrero a Abril según las zonas y el tipo de patrón.

Injertos de yema: Los más usados son el escudete y el de parche o chapa. En el injerto de escudete se usan plantas jóvenes o ramas jóvenes, con la corteza blanda pues hay que realizar un cirte en forma de T, separar la cáscara e insertar la llema del injerto cortada en forma de escudo (de ahí su nombre) para que penetra bien entre la cáscara y la madera quedando la parte superior del escudete alineado con la parte superior del corte en T practicad,. después se ata bien y se sella el injerto. Este tipo de injerto puede hacerse al principio del período vegetativo (Febrero- Abril) o a lfinal del mismo (Septiembre-Octubre).

Injerto en escudete

El injerto de parche o chapa es el más adecuado para regenerar ramas viejas de la oliva y para injertos en ramas gruesas pudoendose injertar varias yemas. Se pueden abrir dos superficies rectangulares en donde fijar el parche del injerto con ventana de una sola jamba o de doble jamba. El injerto ha de coincidir con la ventan abierta,se coloca y se cierra y ata. Una vez prendidos los injertos se podan las ramas viejas por encima de ellos así conseguimos un doble efecto beneficioso dar más luz a las yemas injertadas y poner a su disposición la sabia que acaparaban las ramas antiguas que están por encima de él. Este tipo de injerto es conviente que se haga en la parte exterior de las ramas para facilitar su posterior poda.

Injerto de chapa

Los principales cuidados que debemos observar con los injertos pueden resumirse: Fumigar el injerto antes de taparlo y atarlo y desatarlos al cabo de unos 25 días y pulverizar con fungicida.

La poda

La poda, es una operación necesaria para mantener el equilibrio entre la vegetación y la producción en los árboles frutales. Mediante esta operación se modifica la forma natural del árbol, vigorizando o restringiendo el desarrollo del mismo. Es necesario tener un conocimiento de la fisiología del árbol, es decir, del papel que desempeñan los principales órganos del mismo, pues de no ser así, no es posible percatarse del alcance de la supresión por la poda de parte de la planta, especialmente en el olivo, dada su larga vida. Como principios generales hay que tener en cuenta que la MADERA, es un órgano de sostén de las ramas y hojas y que solamente necesitamos, la madera imprescindible para sostener los órganos de crecimiento y producción. La RAIZ, es el órgano absorbente del agua del suelo, con los nutrientes disueltos en ella y que sirve para anclar el árbol al suelo. La HOJA, es el órgano fundamental donde por medio de la fotosíntesis, se sintetizan las sustancias que han de nutrir todas las partes del árbol, por ello, habrá que estar siempre atentos para conservarlas y mantener una relación normal, entre la cantidad de hojas y raíces del árbol denominada relación HOJA/RAIZ y mantener una relación óptima, entre cantidad de hoja total y cantidad de madera, (denominada relación HOJA/MADERA), que ha de ser lo más alta posible. Es fundamental tener en cuenta, que el olivo fructifica normalmente en las brotaciones producidas en el año anterior, y raramente sobre la madera de tres años, por ello cuanto más brotes tenga el árbol un año determinado, más producción potencial tendremos al año siguiente. Por tanto ante cada olivo, el podador debe saber, que tipo de poda necesita, que cortes ha de realizar y una vez efectuada la misma, estudiar la respuesta o reacción del árbol, pues si en la brotación del año siguiente, se observa un número elevado de chupones, significa que la poda fue muy severa, en cambio, una brotación débil, muestra que la poda fué insuficiente.

BASES AGRONÓMICAS DE LA PODA

Las condiciones o bases agronómicas que debe de cumplir la operación de poda, han de estar encaminadas, a mejorar los resultados económicos del cultivo, buscando los siguientes objetivos:

a) Equilibrar el crecimiento vegetativo y la fructificación, con la finalidad de mantener una producción regular a lo largo de los años y evitar en lo posible la veceria. No sólo debemos de obtener una cosecha, sino preparar el árbol para las siguientes.

b) Acortar al máximo el período improductivo del olivo joven, reduciendo las intervenciones de poda al mínimo necesario, para la formación de árbol.

c) Alargar el periodo productivo, por lo que será necesario hacer una poda de producción, con la renovación de ramas cargadas de madera y potenciando la presencia de ramas nuevas, con gran cantidad de hojas, pero teniendo mucho cuidado en no desequilibrar la vitalidad y anatomía del olivo, cortando ramas aun productivas, pues este, se envejecerá prematuramente afectando negativamente a la producción.

d) Ser de coste económico, huyendo de podas meticulosas, que supone un uso excesivo de tijeras, con lo que se eliminan muchos brotes y hojas, que endurecerán las brotaciones formando olivos con exceso de madera.

e) Por último, ha de tenerse en cuenta que con la poda se debe de procurar mantener árboles con volúmenes de copa equilibrados de acuerdo con las disponibilidades de agua en el suelo, especialmente en el olivar de secano.

EL CORTE Y SU INFLUENCIA EN LA PODA

Existen dos maneras de efectuar los cortes de poda, amputándola totalmente en el sitio de nacimiento de la rama, o acortándola. En el primero de los casos, lo que efectuamos es un “corte de aclareo”, mientras que en el segundo es un “corte de rebaje”.

Las ventajas de realizar un corte de aclareo son las siguientes: se mejora la iluminación de las ramas próximas, las que engrosarán y crecerán lateralmente mejorando la nutrición, y con el tiempo la floración y fructificación.

En el caso del corte de rebaje lo que ocurre es lo siguiente: en la zona donde se efectuó el corte brotan todas las yemas de la zona conservada, trayendo como consecuencia el sombreamiento de las ramas próximas, también con este corte se elimina mayor cantidad de hojas y yemas que madera por lo que resulta conveniente no abusar de este tipo de poda porque altera la relación hoja/madera. Podemos decir que en general el rebaje disminuye el vigor de las ramas, es por ello que concluimos que podando largo (suprimiendo poco), vigorizamos la rama, y podando corto (eliminamos mayor numero de hojas y yemas), la debilitamos.

ÉPOCA DE PODA

Como norma general, la poda debe de realizarse, cuando la actividad vegetativa del olivo sea mínima (diciembre-abril). La poda debe de realizarse lo antes posible, una vez efectuada la recolección, evitando podar cuando la savia ya está en movimiento, ya que la cicatricación de las heridas es peor. En zonas en que sean de temer fuertes heladas es conveniente retrasar la poda.

FRECUENCIA E INTENSIDAD

El aspecto vegetativo del árbol, así como la producción de la cosecha anterior, la disponibilidad de agua y la variedad, nos permitirán decidir sobre la frecuencia e intensidad de la poda, teniendo siempre en cuenta los objetivos enumerados anteriormente. En cuanto a la frecuencia, durante el período de formación se debe de podar muy poco. Durante el período productivo, la poda bianual, parece ser más interesante que la poda anual, procurando en los años de no poda un aclareo de ramas y chupones. En algunas variedades en cambio, hay que podar con una determinada frecuencia, ya que de lo contrario se pueden acentuar los problemas de veceria y envejecimiento. En variedades vigorosas y con tendencia a la alternancia de cosechas, habrá que tener en cuenta, que el año en que se espere una gran cosecha, se deberá de realizar una poda más severa de aclareo de ramas de tercero o cuarto orden; en cambio al año siguiente, es más aconsejable dar una poda más ligera, para que el árbol se recupere más rápidamente. En cuanto a la intensidad de la poda, dependerá del estado vegetativo del olivo y de la finalidad que se persiga. En árboles equilibrados con producciones normales, no se debe eliminar más del 20-25% de la vegetación, para seguir manteniéndolos equilibrados. En podas de renovación o cambio de variedad la intensidad puede ser mayor, pero nunca se sobrepasará el 50 % de la vegetación.

PODA DE FORMACIÓN

La poda de formación tiene por objeto construir, el armazón o esqueleto del árbol, que ha de servir de soporte de los órganos vegetativos y productivos, de ahí la importancia de la misma.

Una buena formación del olivo se basará en:

• Planta de un solo tronco, vertical, con una altura de 0’80 – 1 metro, sobre el suelo, sujeto a una estaca o tutor.

• Se buscará una adecuada estructura de la copa, armada sobre tres ramas principales como máximo, bien distribuidas, o dos ramas bifurcadas dicotómicamente.

Olivo bien formado

• Mantener un buen equilibrio entre la parte aérea y la radicular.

• Conseguir una buena iluminación, para todo el conjunto de la copa.

• Procurar hacer las mínimas intervenciones posibles.

Durante los 2-3 primeros años la poda será mínima, ya que la rápida entrada en producción, dependerá de la cantidad de hojas y ramas que dejemos. Nos limitaremos a eliminar los brotes laterales del tronco, que nacen por debajo de la cruz y a guiar el árbol de una forma libre, practicando ligeros aclareos para regular el volumen y la iluminación de la copa.

PODA DE PRODUCCIÓN

El olivo no podado tiene tendencia a producir más frutos de los que puede alimentar. Esta característica se acentúa con la edad, y las cosechas excesivas dificultan en gran manera el crecimiento de los brotes del año, lo que trae como consecuencia, la reducción de la fructificación del año siguiente, pues no olvidemos que el olivo produce sobre las ramas del año anterior. Este fenómeno de alternancia en la producción, es lo que conocemos como VECERIA. La poda de producción, tiene por objeto conseguir durante el período adulto, que el olivo alcance un volumen de copa productivo, con el fin de conseguir las máximas cosechas, alargando este período productivo, al término del cual, el olivo demandará las podas de mantenimiento y renovación. En todo caso, la actuación de poda debe limitarse a aclareos de ramillas y chupones y la eliminación de alguna rama envejecida, pero evitando los aclareos fuertes de rama fina, que desequilibran la relación hoja/madera, disminuyendo la producción. Una vez se llega a este período, se considera al olivo como árbol adulto, por lo que la poda ha de perseguir los siguientes objetivos:

- Hay que realizar la poda, procurando respetar la tendencia natural de la variedad.

- Mantener el mayor período posible, el equilibrio de la copa del olivo con una elevada relación hoja/madera, favoreciendo la producción y la calidad de los frutos.

- Favorecer el máximo aprovechamiento de la luz ya que los frutos obtenidos en las zonas mejor iluminadas son de mejor calidad, mayor tamaño, y mayor rendimiento graso.

Poda de formación

- Evitar el exceso de madera, que reducen la capacidad de renovación de las ramas productivas.

- Procurar la eliminación de ramas completas, sin hacer rebajes o despuntes, así como los chupones vigorosos, con el fin de no debilitar las ramas donde se insertan, dejando las brotaciones débiles que sombreen los troncos. Hay un dicho popular que dice, “la madera a la sombra y la hoja al sol”.

- Mantener el equilibrio entre las ramas que forman el esqueleto del árbol, evitando la dominancia de unas sobre otras, suprimiendo o desviando las ramas excesivamente largas.

- Siempre que sea posible no dar cortes de ramas de cara al olivo, que favorece la salida de chupones y la formación de caries.

Los tipos de ramas y su producción: De las diferentes ramas que constituyen el olivo, las de más intensa vegetación son las que están mejor iluminadas, es decir, las más centradas y verticales; las más bajas y horizontales padecen -por lo general- de falta de luz, su fructificación es abundante pero se agotan antes; y por último las ramas interiores, casi carentes de luz, producen menos frutos y su vegetación es menos vigorosa. Estudios realizados por Ortega Nieto en España, demuestran que las aceitunas de la parte alta y exterior tienen más aceite y son más grandes; las de la parte media y exterior tienen una riqueza media grasa y su peso es intermedio; mientras que las de la parte interior -peor iluminadas-, tienen menor rendimiento industrial y son las de menor tamaño.

PODA DE RENOVACIÓN

El olivo al final de su periodo adulto, empieza a manifestar síntomas de envejecimiento, momento en que se inicia un desequilibrio en la relación hoja/madera, que lleva consigo un descenso de las cosechas medias, una mayor alternancia de las producciones y un empeoramiento de la calidad de los frutos. Ello se manifiesta, por el escaso crecimiento de los brotes, hojas más pequeñas y falta de coloración, e incluso defoliación de ciertas partes del árbol, son índices que nos indican de la necesidad de renovar el olivo. La poda de renovación o rejuvenecimiento, tiene por objeto la recuperación de olivos envejecidos o endurecidos, con exceso de madera. Se basa en un rebaje general del árbol, eliminando progresivamente las ramas menos productivas en varias podas. En general esta poda solo debe de intentarse en olivos sanos, cuya debilidad sea originada por la edad. El olivo tiene una gran capacidad de autorregenerarse, dada la abundancia de yemas latentes que tiene en la madera vieja, y que estimuladas debidamente por la poda, evolucionan como las yemas normales de madera. La renovación se puede hacer de varias formas, eligiendo la más conveniente en cada caso, teniendo en cuenta el estado del árbol, la variedad y la experiencia del podador:

Poda renovación

1. Renovación parcial de la copa, con acompañamiento de la producción.

2. Renovación total por descabezado total del árbol.

Una poda tan enérgica como la indicada, ocasiona un gran desequilibrio entre la parte aérea y la radicular, por lo tanto, se deben de realizar unos cuidados posteriores, para paliar en lo posible este desequilibrio, realizando adecuadamente los abonados, riegos y tratamientos. Todo ello se complementará con los oportunos aclareos de los brotes, para orientar adecuadamente la constitución de la nueva estructura del árbol. No se debe de esperar a iniciar las renovaciones, hasta el momento en que todo el árbol esté envejecido, si no que se empezará, a partir, de que las ramas muestren los primeros síntomas de envejecimiento o decadencia, aprovechando las brotaciones que se producen habitualmente, y que tienden a renovar el árbol de forma natural.

Infloresecencias del olivo

Refranes y sentencias

- " Cada mochuelo a su olivo y cada puta a su rincón".

-" Olivo y aceituno, todo es uno".

- " Pan de trigo, aceite de olivo y de parra el vino".

- "Aceite y vino, bálsamo divino".

- "Aceituna, una por San Juan y ciento en Navidad".

- "Agua y luna tiempo de aceitunas".

- "Año heladero, año aceitero".

- "Aceituna comida, hueso a la calle". (a olvidar el pasado infeliz).

- "El que coge aceitunas antes de Enero, deja el aceite en el madero". (porque aún no llego a su tamaño ni maduración).

- "El remedio de la tia Mariquita que con aceite todo lo quita".

- "Flor del olivo en Abril, aceite para el candil". (por temprana y poder helarse)

- "Flor del olivo en Mayo, aceite para el año".

- "Flor del olivo por San Juan, aceite para entinajar".

- "Quien a los propios olivos varea, a su propio caudal apalea".

- "Quien tiene olivares y viñas, bien casa a sus niñas".

- "Blanquizares para viñas, que no para olivares".

- "El olivar hace el bien, aunque le hagan el mal".

- "El olivar y el potro, que los crie otro".

- "Si alguna vez me olvidares, tálame aunque no me ares". (dice el olivo).

- "Si por San Juan y San Pedro en tu olivar aceitunas hallas, una aquí y otra allá, buena cosecha habrá".

- "Por Santa Catalina todo el aceite tiene la oliva".

- " Aceite y romero frito, bálsamo bendito".

- "San Silvestre en tinaja el aceite".

- "La mejor cocinera, la aceitera".

- "Aguas por San Juan, quitan vino, aceite y pan".

- "A la aceituna y al gitano no lo busques en verano".

- "Olivo, bruto, que a fuerza de palos da su fruto".

- "Para ser Extra Virgen: del olivo a la prensa y de la prensa a la despensa".

- "Si quieres llegar a viejo, guarda aceite en el pellejo".

- "Sin tierras y olivares que seria de las ciudades".

- "Más prestan sobre olivos que sobre pergaminos".

- "Hacendado con olivos, un año en terciopelo y seis en cueros vivos".

- "En el tiempo de las aceitunas, tienen novio las sobrinas".

- "Hombre fantasmón, poco aceite y mucho algodón".

- "A lo que aceite de oliva hecho, sácole provecho".

- "El vino calienta, el aceite alimenta".

- "El rancio es bueno en el vino, pero malo en el aceite y en el tocino".

- "El pez ha de nadar tres veces: en agua, en vino y en aceite".

- "El olivo es más agradecido que la gente, por cada beneficio te devuelve veinte".

- "Aceite y aceituna a veces mucha otras ninguna".

- "Aceite abundante buen año por delante".

- "Casa del padre, viña del abuelo y olivar del bisabuelo".

- "La verdad como el aceite, queda siempre por encima".

- "Olivo, vino y amigo, el peor el más antiguo".

- "Aceite de oliva, todo mal quita".

- "Si te duele la barriga úntale con aceite de oliva, y si no se te quita el mal, reluciente se te pondrá".

- "Para el Vareo: A las mujeres de frente, a los olivos de lado".

- "Con aceite de candil, mil males curar vi".

Clasificación alfabética de la flora malpiqueña