Flora y fauna de Malpica de Tajo


 

Termitas

Su nombre deriva del latino "termes" que significa gusano roedor. Las termitas (también conocidas como hormigas blancas) pertenecen al orden de los isópteros (dos pares de alas iguales, los individuos adultos alados, ya que la

mayoría son ápteros), se caracterizan por ser insectos sociales que viven en colonias (termiteros de hasta 2 millones de individuos) formadas por un elevado número de individuos diferenciados en castas por su forma y funciones y que se alimentan de madera y otros materiales ricos en celulosa (xilófagos). Las termitas digieren la celulosa con la ayuda de microorganismos que viven en simbiosis dentro de su aparato digestivo. Las termitas tienen importancia económica como plaga en madera, papel y cartón de estructuras, obras de artes y productos almacenados. En cada colonia, la reina es la única que pone huevos. Las termitas, además de madera, también pueden alimentarse de hongos microscópicos que ellas mismas cultivan. Incluso estos insectos pueden alimentarse de las secreciones que emiten algunos insectos coleópteros (escarabajos) que viven de forma simbiótica con las termitas dentro del termitero. Por otra parte, las termitas aprovechan al máximo las sustancias alimenticias del termitero y consumen el exoesqueleto quitinoso de las mudas o bien se alimentan de los individuos muertos

Termita

Morfología: Su tamaño es pequeño o mediano, tienen el cuerpo alargado y deprimido y el tegumento poco esclerotizado, si bien, los individuos reproductores están más esclerotizados que los de las otras castas, en los que la cabeza es la parte más endurecida. Cabeza prognata (con mandíbulas salientes), con antenas moniliformes (en forma de gotas) y ojos compuestos y ocelos que con frecuencia pueden estar reducidos o incluso no existir: el aparato bucal es masticador. Tórax con amplias zonas membranosas entre los distintos escleritos torácicos: los tres pares de patas son semejantes, con las coxas desarrolladas y casi siempre tienen cuatro tarsómeros; los dos pares de alas. Cuando están desarrolladas, son semejantes. membranosas y caducas, perdiéndolas después del vuelo nupcial. Abdomen con once segmentos y terminado en dos cercos cortos. Los órganos genitales de ambos sexos faltan, o están muy reducida en la mayoría de las especies. Son ovíparos y su desarrollo es paurometábolo (la ninfa y elinsecto adulto viven en elmismo ambiente).

Las especies que se han detectado en la península ibérica son:

1) Termitas subterráneas: Tienen el termitero bajo tierra y desde ahí atacan a la madera de la superficie, son las más corrientes en las casas rurales. En el litoral mediterráneo parece que predomina la especie R. banyulensis y en el resto de la península R. grassei y R. santonensis.

2) Termitas de la madera seca: Suelen vivir en el interior de la madera sin tomar contacto con el suelo. La más común es la Kalotermes flavicollis y Cryptotermes brevis (en Canarias).

Termita subterránea, Reticulitermes banyulensis.

Es la que infecta algunas viviendas del pueblo. Se alimentan de la celulosa, que encuentran en la madera o cualquiera de sus derivados (papel, cartón, aglomerado, etc...) El termitero suele estar situado en el subsuelo y encontrarse a más de 40 metros del lugar en que se detectan sus señales. Tienen fototropismo negativo (huyen de la luz), por lo que acceden a la madera de les casas (vigas, marcos de puertas y ventanas, zócalos, muebles adosados, etc.…) desde el interior y atravesando muros y paredes. En algunos casos, en paredes muy duras o cuando precisan intercambios de humedad y/o temperatura, salen al exterior de los muros, formando unos túneles característicos, compuestos de arena y excrementos cementados por saliva. (popularmente conocidas por “lágrimas”). La alimentación del termitero se produce por trofalaxia (estómago social), que consiste en transportar el alimento en el estómago y transmitirlo de un individuo a otro a través del boca-boca o ano-boca. Este comportamiento sirve también para transmitir sustancias (feromonas) que regulan la composición y comportamiento de la comunidad.

Hay distintas castas con morfología y funciones bien diferenciadas:

Obrera

Obreras : Son ápteros y con cuerpo más blanquecino y menos quitinizado. Es la casta más numerosa (90-95% de la colonia) y la que se encarga de la búsqueda de nutrientes, de alimentar al resto de las castas (vía trofalaxia), cuidar de larvas y huevos, así como de la construcción del termitero. Se mueve sin cesar para procurar alimento y es la responsable de los daños estructurales. Cuando una termita obrera encuentra una fuente de alimento, deja un rastro de feromonas, un camino perfumado que guía a las trabajadoras. Éstas buscan el alimento y lo llevan al nido para alimentar a lossoldados y a las reproductoras, que no pueden procurarse la comida por sí solas. Se creía que no tenían capacidad reproductora, pero estudios recientes han demostrado que pueden mudar a castas reproductoras (pareja real, protoadultos…) o bien convertirse en soldados.

Soldado

Soldados : Representan entre el 2 y el 4 % de los individuos de la colonia. Tienen como función la protección del termitero de sus enemigos naturales, como por ejemplo las hormigas (su principal enemigo). Son también blancas y de la misma talla que las obreras pero con la cabeza fuertemente recubierta de quitina de cuya boca sobresalen dos fuertes mandíbulas que es son su medio de ataque y defensa. Tampoco tienen capacidad reproductora.

Reina y rey

Pareja real : La reina primaria o la hembra reproductora suplementaria pueden tener un crecimiento exagerado postmetamórfico del abdomen en longitud y grosor a expensas de la expansión que sufren las zonas membranosas de las pleuras sin que los tergos y estemos aumenten de tamaño (hembra fisogastrica), pasando de un tamaño normal de unos 2 cm de longitud hasta 10 u 11 cm. Para ello, su abdomen se dilata y crecen los ovarios, el intestino, el cuerpo graso, el sistema nervioso el vaso dorsal, y (por consiguiente) aumenta el volumen de la hemolinfa a la vez que se multiplican las ramificaciones traqueales. Por último, el número de ovariolos aumenta pasando de unos pocos a muchos, incluso miles. Es la única casta con capacidad reproductora en activo del termitero, son los responsables de incrementar la población. Esta casta emite sustancias hormonales (feromonas) que regulan el funcionamiento interno del termitero (desde el número de obreras a la inhibición del desarrollo de los reproductores suplementarios). La reina que puede vivir hasta 20 años, practicamente no se mueve, es alimentada por las obreras, produce los millones de huevos de la colonia y la feromonas necesarias para el equilibrio del termitero. La reina y el rey viven en una celda aparte y son alimentadas y cuidadas por las obreras.

Reproductores suplementarios: Los reproductores suplementarios son fértiles en potencia.

Futura reina

Tienen su capacidad reproductora inhibida por la influencia hormonal que ejerce la pareja real del termitero al que pertenecen. Si alguno de los miembros de la parella real se debilita (por vejez o enfermedad) finalizan su desarrollo rápidamente y le sustituyen. La influencia hormonal también puede verse interrumpida por una interrupción de la comunicación de una parte de la colonia con su núcleo central (interrupción causada, por ejemplo, por un tratamiento químico convencional). Si los reproductores suplementarios están acompañados por un número suficiente de obreras que les ayuden, pueden formar un nuevo termitero completamente independiente del original. Cuando este termitero se encuentra por encima del nivel del suelo (por ejemplo en el interior de una casa, generalmente en una viga) se denomina termitero aéreo.

 

Reproductores primarios: Con alas bien desarrolladas (macrópteros) y el cuerpo esclerotizado y de colores oscuros, ojos y ocelos bien desarrollados. A este tipo pertenecen individuos sexuados (reinas y machos) fundadores de nuevas colonias. Estos individuos se encargan de la proliferación de las colonias de termitas subterráneas, ya que son las futuras reinas de una nueva colonia. En la época favorable del año (en función de la humedad y la temperatura) salen volando (vuelos nupciales). Las hembras se desprenden de las alas emitiendo feromona sexual. Los machos atraídos por el mensaje químico las siguen (tandem-running).

Termitas aladas

Una vez aparejados, buscan un hábitat favorable para realizar la puesta de los huevos y convertirse en pareja real. De los huevos, surgen las primeras larvas que son alimentadas por sus padres con la musculatura de las alas de la que se han desprendido antes de la cópula. Las primeras larvas se transforman en obreras, que rápidamente iniciarán la búsqueda del alimento y acondicionarán los diferentes espacios que requiere un termitero. Mientras, la hembra de la pareja real desarrolla extraordinariamente su abdomen, para poder mantener un elevado ritmo de puesta. Las obreras alimentan, limpian y cuidan de la pareja real y mediante este contacto transmiten el complejo sistema hormonal que regula el interior del termitero. No todos los individuos del termitero se alimentan de la misma forma. Unos cuantos se dedican a su búsqueda y al hallarlo lo digieren y transportan en su tracto intestinal. El resto de individuos que no se alimentan directamente de la madera, lo hacen mediante la trofalaxia: el alimento se regurgita (vía boca-boca o ano-boca) y compartido con los individuos que precisan alimentos. Esta transmisión de alimentos proporciona al termitero una doble ventaja: por un lado se maximiza el aprovechamiento de energía y por el otro se reparten de forma homogénea las hormonas de la pareja real. Una vez se ha conseguido un elevado número de obreras aparecen los primeros soldados y, posteriormente los reproductores suplementarios.

Además de los tipos indicados, formando parte de las colonias, hay individuos inmaduros que responden a dos tipos morfológicos:

a) Ninfas ápteras: son inmaduros que carecen de esbozos alares, y tras varias mudas, darán normalmente soldados y obreras.

b) Ninfas braquipteras: son inmaduros con es­bozos alares y gónadas no funcionales que, tras varias mudas, formarán individuos se­xuados.

Termitas de la madera seca: Kalotermes flavicollis

Quizás éste término, no es muy adecuado, para Kalotermes pues también come maderas húmedas. Cómo por ejemplo en carpinterías de madera exteriores (en balcones, terrazas, voladizos…). Quizás su abundancia en maderas a la intemperie es debido al modo de originar nuevos termiteros, a través de sus vuelos nupciales (generalmente desde Setiembre hasta Noviembre).

Marco vaciado por el ataque de termitas

Se encuentra en las regiones más húmedas del área mediterránea. Sus termiteros son de 1000 a 1500 individuos. Sus termiteros están excavados en la propia madera. Es decir su háitat es su propio alimento. La reina no presenta el abdomen hipertrofiado, encontrándose con el macho en una galería ancha que hace de cámara real. A diferencia de la termita subterránea son las ninfas de últimos estadios los encargadas de recolectar y distribuir el alimento a la comunidad. Es por eso que cuando se habla de ésta especie se dice que tiene "falsas obreras". Forman colonias en el interior de la madera. Muebles, cajas, marcos, puertas, vigas, árboles vivos y muertos. También son capaces de anidar en paneles de madera aglomerada... Una característica de estas termitas son las pequeñas bolitas fecales que pueden caer del elemento atacado o bien llenando sus galerías. Las galerías siguen las vetas de la madera y dejan la madera limpia (sus bolitas fecales no quedan pegadas a no ser que por su antigüedad se hayan apelmazado). El desarrollo de las colonias es lento, pero sus daños estructurales pueden ser muy graves en caso de infestación de múltiples colonias. Las colonias se instalan en las maderas mediante vuelos nupciales que pueden producirse en épocas de primavera aunque es más común en otoño. Al igual que las termitas subterráneas, el método natural de creación de nuevas colonias es mediante el vuelo nupcial (enjambrazón). Pero en este caso las reproductoras primarias (futuras reinas) se introducen en la madera en lugar del suelo. Una característica diferencial entre la reproductora primaria subterránea y la de k. flavicollis es una pequeña coloración clara su prognoto. Tampoco coinciden las épocas de salida de voladoras. No tienen una gran capacidad de movimiento cómo la termita subterránea, puesto que K. flavicollis no atraviesa paredes sino que infesta las maderas en contacto o muy cercanas (pueden llegar a fabricar pequeños y muy cortos canales exteriores pero realmente inestables, puesto que están formados de sus bolitas fecales). Si bien su tamaño cómo individuo es mayor que la termita subterranea las dimensiones de los termiteros son mucho más pequeños, tanto en tamaño cómo en número. Un termitero Kalotermes flavicollis es menos estable que un termitero subterráneo, su limitación es su propio hábitat que es su alimento, pudiendo sobrevivir unos años. No puede perpetuarse cómo un termitero subterráneo que en teoría puede seguir renovándose de forma indefinida. Por el contrario en un principio la capacidad de K. flavicollis de creación de nuevas colonias es superior a la termita subterránea.Pudiendo convertirse en una grave amenaza para estructuras de madera, colecciones y domicilios particulares.

Síntomas de la presencia de termitas

• La señal más obvia son los canales que vacían en la madera (la imagen del márgen es la parte inferior de uno de los marcos de mi casa ) y nubes de termitas voladoras que pueden ocurrir dentro y fuera del hogar (ya es tarde habrán ocasionado en algunas maderas destrozos irreversibles).

Marco atacado de termitas

• Muchas veces, podemos observar ondulaciones y protuberancias en la pintura que recubre los elementos de madera, sobre, los que, si presionamos con el dedo, observaremos como se hunde.

• A veces, se observan decoloraciones de la madera recubierta por barniz y esto es debido a que la madera, que hay por debajo, ha sido devorada por las termitas.

• Otros de los signos de la presencia de termitas, es la aparición de tubos de barro sobre las paredes o colgando de las vigas de madera.

• En algunos casos, podemos llegar a encontrar restos de estos insectos (termitas muertas y pilas de alitas transparentes, que asemejan piel de cebolla), que también nos servirían para diagnosticar el problema, por lo general, termitas aladas u obreras en el interior de la madera.

Además de los ojos y la experiencia, existen los siguientes métodos de detección:

— Destornillador o picador de hielo: Es el método más habitual y sencillo. Consiste en hundir un destornillador o picador de hielo en la pared: si está sólida, no se podrá entrar demasiado en ella. Si, en cambio, se la nota blanda, habrá que hacer una cuidadosa inspección de toda la pared, porque es un indicador claro de peligro. También hay que chequear la existencia de túneles desde el suelo, alrededor de la fundación de la madera.

— Detector acústico: Es un método más sofisticado. Los nuevos detectores acústicos, algunos en etapa experimental, se ocupan de captar –con instrumental de alta sensibilidad- las señales del movimiento y la alimentación de las termitas. Sentricon, de Dow AgroSciences, tiene un sistema de monitoreo electrónico, que detecta y graba la actividad de las termitas dentro de una estación subterránea. A partir de la detección, se envía el cebo hacia la colonia.

— Detector de gas: Las termitas tienen bacterias en su estómago que, cuando digieren la madera, la transforman químicamente en gas metano. Los detectores de gas, entonces, son instrumentos que pueden chequear la existencia de gas metano en el interior de los muros. El uso es sencillo, pues únicamente hay que moverlos a lo largo de la pared para detectar la posible presencia de termitas. En general, vienen con baterías recargables.

— Cámaras infrarrojas: Son parecidas a las cámaras de video comunes, muy fáciles de usar y generan imágenes de alta resolución. Pueden advertir sobre la presencia de termitas en una pared sin daños visibles, porque escanean y detectan los índices elevados de humedad. Además, pueden captar imágenes de los túneles que construyen los insectos. Se las utiliza en programas de mantenimiento preventivo.

— Medidor de humedad: Marca con toda precisión las áreas con altos niveles de humedad (15 por ciento o más), que son los lugares más aptos para la existencia de termitas. Los más nuevos y efectivos son los medidores profesionales digitales, con un display donde se puede leer claramente el nivel de humedad que contiene la madera y sus eventuales variaciones.

— Detector por microondas: La tecnología utilizada para hallar bombas o armas ocultas se está usando actualmente para detectar la presencia de termitas. Actúa como un radar que registra el movimiento de los insectos a través de la madera o bajo las baldosas o las tejas. Boroscopio Es un instrumento de inspección visual para ver el interior de áreas inaccesibles. Tiene luces de fibra óptica y una punta flexible que permite, a partir de un pequeño agujero, que el profesional acceda al chequeo de zonas muy profundas de la pared. Algunas compañías también usan estetoscopios para escuchar la actividad de las termitas.

— Perros entrenados A pesar de que muchas veces se usan los beagles, casi todas las razas pueden ser entrenadas para oler el gas metano que las termitas emiten cuando digieren la madera. No se necesitan agujeros en la pared ni roturas, porque los perros desarrollan una sensibilidad especial para detectar el gas y localizar una colonia en pocos minutos. Si pueden oler drogas, explosivos y personas perdidas, ¿por qué no termitas?

Factores de riesgo y prevención

La principal atracción de las termitas es la madera: leña mal controlada, restos de árboles en el jardín, estacas clavadas, marcos de puertas y ventanas, muebles antiguos, etc y el principal factor amplificador es la humedad: paredes húmedas, suelos mojados, filtraciones de agua en tuberías y sanitarios, mala ventilación, patios encementados o pavimentados, etc. Se ha de procurar también evitar humedades y airear estos lugares. Y que la madera no penetre directamente en el suelo de la casa (poner capa de cemento). Lo mejor encargar insapecciones anuales a empresas especializadas.

Control y tratamiento de la plaga

Lo primero que se ha de hacer cuándo se detecta la existencia de termitas en un edificio es quitar el material celulósico que utilizan como alimento, principalmente por lo que respecta a los sótanos donde se acumula generalmente papel, madera, etc. Seguidamente se tratará toda la madera del inmueble inyectando termiticidas en la cabeza de las vigas y en tramos discontinuos de éstas. Este tratamiento se hará también en los marcos de puertas y ventanas, en caso de estar afectados. Por lo que hace respecto al exterior del edificio, se hará una barrera química a su alrededor cavando una zanja de unos 30-40 cm de profundidad, donde se pondrá termiticida.

Esta barrera ha de ser total y uniforme, pudiendo requerir en algunos casos, la inyección del producto en el suelo de la casa y en las paredes. Actualmente existen otros métodos para erradicar a los termes como es el uso de los cebos y después la sustitución de éstos por insecticidas inhibidores de la formación de quitina (IGR’s). La costumbre de limpiarse y de lamerse entre sí que tienen las termitas, permite otra forma de control que consiste en la utilización de polvos tóxicos, y así basándonos en su etología, sabemos que expanden el veneno por la colonia. Se utilizan también, con resultados mas o menos positivos, la eliminación de los simbiontes del tubo digestivo con substancias químicas y el control de temperaturas y humedades en unos niveles a partir de los cuáles, las termitas no pueden sobrevivir. Se han iniciado experimentos de control biológico mediante nematodos que, aunque en el laboratorio han tenido éxito, en la práctica no han dado resultados efectivos; en cuanto a las hormigas, que son enemigos naturales de las termitas, no es posible su utilización ya que no se puede combatir una plaga con otra plaga. En los lugares con mucha infestación de termitas, previo a la construcción, se puede tratar el suelo tanto con termiticidas químicos como con agentes físicos como por ejemplo barreras de tela metálica o partículas de tierra de una medida que impidan que las termitas puedan hacer galerías o material plástico impregnado con termiticida.

Curiosidades

— La celulosa muerta es su única fuente de alimentación, por ello es que no comen la madera "viva" de los árboles. Vistas desde otro punto, las termitas son grandes recicladoras de la naturaleza. Lo malo es que no pueden diferenciar entre un pedazo de leña caído de un árbol y la madera "muerta" de la estructura de una casa.

— Una colonia de la especie más común, la Reticulitermes Flavipes, puede comer 4 gramos (0.14 onzas) de madera por día.

Huevos de termita

— Una reina puede poner un huevo cada 15 segundos.

— Todos hemos mencionado alguna vez a las termitas, pero muy pocos las hemos podido ver con nuestros propios ojos. Sin embargo, las 2.600 especies de termitas que existen en el mundo constituyen el 10 % de la biomasa total del planeta. Después de los rumiantes, las termitas son las criaturas más contaminantes: su dieta rica en fibra es la responsable del 11 % de las emisiones globales de metano. Por eso su estómago se parece también al de las vacas: cuenta con diversos compartimentos para descomponer la celulosa; y sus intestinos albergan 200 tipos de microbios que la trasforman en energía.

— Se están llevando a cabo estudios de estos organismos diminutos financiados por la industria del biocombustible para comprobar si tienen el secreto de la extracción de combustible limpio a partir del maíz.

— ¿En qué se basa una termita para comerse una u otra madera? En las vibraciones que produce cuando empieza a roerla. Prefieren, pues, los muebles a los árboles. Las fibras de madera se rompen al morderlas y envían impulsos al cuerpo que revelan el tipo y tamaño de la pieza. Las obreras ciegas son las que roen la madera para alimentar al resto de la colonia directamente de su boca o de su ano. Pero las termitas también pueden excavar a través del hormigón.En Norteamérica provocan más daños que los incendios y las inundaciones combinadas.

— Las termitas tienen grandes valores familiares, y además son monógamas, a pesar de que viven en colonias de millones de individuos. La reina se parece a la madre de Alien: puede aumentar hasta 300 veces su tamaño original porque sus ovarios se expanden. La reina de la especie Odontotermes obesus, por ejemplo, pone un huevo por segundo, más de 80.000 al día.

— En 2007, una investigación sobre el ADN reveló que en realidad son cucarachas. Su antiguo orden Isoptera (“alas iguales”) ha quedado atrás y ahora son Blattodea (blatta en griego significa “cucaracha”). La teoría es que evolucionaron a partir de ancestros similares a cucarachas cuando desarrollaron la capacidad de comer madera.

— Las termitas son uno de los insectos culinarios más populares: contienen un 75 % más de proteínas que un filete de ternera. En Nigeria se vende caldo de termitas en cubitos.

— Las termitas pueden viajar más de 250 pies (76.2 metros) desde su colonia. En su avance atraviesan el yeso, el plástico y aún el asfalto por cualquier grieta hasta alcanzar su plato favorito.

— Mueren con la exposición directa a la luz del sol y al aire libre.